El año noventa y cuatro
a partir de su mitad
ha sido un año funesto
nos trajo esta enfermedad
la meningoencefalitis,
nuestra gran desconocida
ahora sí la conocemos
y hay que ver en que medida.
La meningoencefalitis
se te cruzó en tu camino
y sus intenciones eran
las de torcer tu destino.
En cuidados intensivos
te tuvo unos once días,
tú luchando contra ella
y nosotros esperando
con angustia tu salida,
Al final tu la venciste
Dios se puso de tu lado
con la ayuda de doctores,
enfermeras, enfermeros
y personal sanitario.
Y porque todos queremos
que de aquí salgas andando,
aquí en rehabilitación
ya te estan rehabilitando.
A todos ellos nosotros
queremos darle las gracias,
pues todos nos han tratado
con agrado y eficacia.
En cuanto a nuestra familia
a vecinos y amistades,
también les damos las gracias
por sus ánimos constantes.
Y tus hijos estuvieron
a tu lado noche y día
y el que estas letras escribe
hacia lo que podía.
Tus nietas se lamentaban
de que no te podían ver
y hasta a los guardas, en vano
trataban de convencer.
Y así un día tras de otro
el tiempo ha ido pasando
y el día once de Octubre
nos llega tu cumpleaños.
Queremos en este día
que te sientas muy fefiz
porque tus hijos y yo
lo deseamos así.
Que nos sirva de escarmiento
la maldita garrapata
yo siempre despreciaré
aquella maldita gata.
J. Acedo
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